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La Expedición Trineo de Viento a la Antártida finaliza con éxito

La Fundación Opera ha participado como mecenas de este proyecto desarrollado durante los meses de noviembre a enero

La expedición española Trineo de Viento a la Antártida ha finalizado con éxito tras cuatro meses de viaje.  El jefe y promotor de la expedición, Ramón Larramedi y sus tres compañeros– Ignacio Oficialdegui, Hilo Moreno y Manuel Olivera- llegaron a la base antártica rusa Novolazárevskaya el 2 de febrero tras 52 días y 2.538 kilómetros recorridos. Una aventura única, que Opera Global Business ha seguido de cerca.

Los cuatro expedicionistas regresaron a España el 12 de febrero después de haber pasado unos días en Sudáfrica. Allí, los recibieron distintas personalidades, tanto locales como de la embajada española. Ya en Madrid los protagonistas han compartido todos los detalles de su aventura.

Ha sido duro pero consideramos esta travesía un gran éxito geográfico, técnico y científico. Hemos demostrado que es posible recorrer miles de kilómetros, con 2.000 kilos de carga, sin contaminar y haciendo ciencia puntera, en un territorio complejo. Y ese era nuestro objetivo. Aún tenemos que hacer balance total, pero estamos bien y muy contentos.

Señala vía satélite desde la base rusa Ramón Larramendi.

El Trineo de Viento ha soportado condiciones extremas sin sufrir ningún daño. También ha demostrado que se puede hacer una travesía  impulsados únicamente por una energía limpia cómo la eólica.

Los aventureros han querido agradecer el apoyo de su principal patrocinador, la Fundación Príncipe Alberto II de Mónaco, a la agencia de viajes Tierras Polares, a la Agencia Espacial Europea y a Altus, además de a los 350 mecenas entre los que se encuentra la Fundación Opera.

El equipo ha recogido datos y muestras para una decena de proyectos científicos. En un principio, el plan de Larramendi era realizar 2.000 kilómetros de ruta, si bien finalmente han sido un 20% más y en menos días. Finalmente, han cumplido el reto de subir al Domo Fuji, quedando a escasos metros de su punto más alto. La expedición Trineo de Viento es pionera en este tipo de travesías científicas y de exploración polar, ya que es la primera a nivel mundial de estas características.